Hace justo un año echaron a andar estas Sevillanadas. Un año con todos sus días y todas sus noches, con sus alegrías y sus sinsabores, con sus momentos buenos y sus ratos para olvidar.
Un año desde que este humilde aficionado a las cosas de Sevilla diera el pistoletazo de salida a un diario personal en el que reflejar impresiones sobre la actualidad de la ciudad en la que vivo, he vivido y viviré como mínimo hasta el 2047 (euribor mediante); impresiones que he tratado siempre que fueran expuestas desde el punto de vista mas objetivo posible (aunque las palabras “personal” y “objetividad” no suelen casar muy bien); e impresiones que, como no podía ser de otra forma tratándose de un servidor, hacen constantemente un guiño a la arquitectura y a la historia.
Reconozco que al principio no daba un duro porque la vida del blog se alargase mas de uno o dos meses. De siempre he alternado fases de cabezonería y tozudez sin límite con períodos de abandono y dejadez; quizás al final va a resultar que los horóscopos tienen algo de razón y mi personalidad está influenciada por el signo de Géminis (uno que nació un 6 del 6, como la bestia o como Velázquez, se ve que siempre tenemos dos caras a elegir).
Astros aparte, ya era algo veterano en estas lides; es mas, aquel 31 de Enero de 2008 no era la primera vez que abría un blog o un espacio de este tipo (ni creo que sea la última) para abandonarlo al poco tiempo. Y es que estas Sevillanadas tenían todas las papeletas para seguir ese camino, ya que fueron concebidas en un momento de cabreo, como una especie de válvula de escape con la que apaciguar mis demonios internos ante una serie de sucesos que se habían concatenado en pocos días y que me habían sacado de mis casillas (exagero un poco, que voy a parecer un ogro...)
Pero, sin que sirva de precedente, por una vez no me cansé. Al contrario, seguí escribiendo y cabreándome (tanto que a veces, cuando releo alguna que otra entrada, me da hasta un poco de pavor…).
Y llegó la Primavera y con ella las primeras visitas, los primeros comentarios, los primeros encuentros con otros blogueros (entonces, ahora amigos), las primeras colaboraciones… Tantas cosas llegaron que un buen día, en uno de esos bajones anímicos que te obligan a replantear algunos aspectos de la vida y que tan necesarios son a veces, caí en la cuenta de que Sevillanadas había dejado de pertenecerme completamente, que ya no era ese folio en blanco en el que esbozar todo aquello que se paseara por mi cabeza.
Bien es cierto que ésto no es algo exclusivo de este espacio, es más, suele pasar en la mayoría de los blogs y en mucha mayor medida, pero me llamó la atención el hecho de que no fuera necesario que anduviera por estos lares para que aparecieran comentarios e incluso debates. En definitiva, que Sevillanadas tuviera vida propia. Por fortuna.
Y es que echando la vista atrás, recordando esa senda que nunca más volverá a ser pisada, todo ésto ha merecido la pena. Y mucho.
Han merecido la pena esos paseos con mi cada vez mas quemada Traveller DC; esas horas interminables buceando tanto en las últimas novedades de los escaparates como en los viejos libros de mi padre que desde niño me infundieron el amor por mi ciudad; esos pellizcos en el estómago al darme cuenta de que era imposible sacar un mínimo de tiempo para escribir la entrada de la semana; esos berrinches de Ester (con toda la razón del mundo) cuando caía en la cuenta de que el interés que tenía por visitar cuatro calles apartadas no era mas que para sacar fotos a unas cuantas piedras.
Ha merecido la pena porque gracias a todo ello he podido conocer a gente fantástica y maravillosa con la que, en muchos casos, incluso tengo el lujo de compartir momentos que van mas allá de la pantalla del ordenador. Y, por supuesto, porque sigo haciendo lo mismo que toda la vida, aunque ahora todo sale un poco mas allá de las paredes de mi habitación.
A fin de cuentas, ésto no es mas que un diario personal hecho público, un ejercicio de exhibicionismo en el que cada uno plasma sus intimidades, las cuales, en mayor o menor medida y siempre dentro de unos esquemas, son publicadas para todo aquel que quiera leerlas. Poco más. Y todo aquel, llámese “enrique”, “fernando” o como le salga en gana, que pretenda ver mas allá tiene un grave problema. O bien necesita una tila.
Paro el carro que voy a terminar cabreándome y es mi día de celebración; pero si hay algo que me ha sacado toda la vida de quicio son los cobardes.
También acabo ya, que tampoco es plan de hacer una conmemoración por entregas en plan Avenida de la Constitución.
En resumen, un año de blog y un millón de gracias a todos los que haceis posible estas Sevillanadas, porque sin ningún tipo de duda, todo esto es gracias a vosotros. A todos y cada uno de vosotros, sin excepción.
Me repito una vez mas, pero es que no se me ocurre otra forma de decirlo: un millón de gracias.
Amigo Du Guesclin, enhorabuena por este primer año de Sevillanadas. Ya te he comentado muchas veces lo que disfruto con tu página. Pero mas que darme las gracias, te las doy yo a ti por iniciarme en este mundo...ya ha llovido bastante (en sentido literal y figurado) desde que nos encontramos y estuvimos charlando acerca de tu página, al día siguiente fue mi primera visita...y el descubrimiento del mundo del blog, en el cual aún me siento como un "novato".
ResponderEliminarLo dicho, enhorabuena, y aqui sigo a la espera de tus nuevas lecciones sobre esta ciudad que tanto nos engancha.
Un fuerte abrazo!!!
Enhorabuena Mi General.Gracias a ti por enseñarnos a nuestra Sevilla perdida en el tiempo.
ResponderEliminarBlogs como el suyo, hacen que luchemos por nuestra ciudad.
Enhorabuena.Por cierto el 31 de Enero es un dia especial para usted y para mi.Ayer fué mi cumpleaños y su aniversario bloggero.Le pongo canción y sería KEEP YOUR SELF ALIVE
Un abrazo canino.
La Canina seguirá cavilando....
Nacimos el mismo día amigo Du Guesclin...6 del 6...
ResponderEliminarFelicidades en tu primer aniversario!
Saludos
E. Morillo
Enhorabuena por el año. Esperamos muchas más horas de lectura apasionada.
ResponderEliminarAntonio
Gracias a ti por cada una de tus lecciones. Enhorabuena y felicidades.
ResponderEliminarUn abrazo.
Enhorabuena!
ResponderEliminarUn blog fantástico con el que se aprende y dsfruta tanto, una blegtura imprescindible.
muchas felicidades pare
ResponderEliminarMi blog nació tb de un cabreo,de un mal día. De repente sentí la necesidad de expresarme y no me bastó la cerámica, necesitaba algo más. Como tú, comprendo que un blog en sí mismo no sería nada si no tuviera sus seguidores. A ellos debemos dar las gracias pq siempre es agradable que estén ahí y que compartan tus pensamientos, inquietudes, preocupaciones ...Gente a la que conoces y otras que a pesar de encontrarse a miles de kilómetros un día te descubrieron y permanecen ahí. Llevo poco tiempo leyéndote pero espero seguir tb aquí hasta el año 2047.Intenta cabrearte menos porque es mu malo pa el cutis. Yo lo intento to los días pero no siempre con éxito.
ResponderEliminarGracias por entregarnos un año de tu amor a nuestra ciudad.
ResponderEliminarUn abrazo.
Espero poder de nuevo felicitarte dentro de 365 días y como ya te he comentado en algunas ocasiones, con tus entradas estoy aprendiendo muchas cosas que desconocía de nuestra Sevilla
ResponderEliminarFeliz Aniversario y muchos besitos
Vaya, como no lo imaginé antes… un cabreo y… ¡Sevillanadas! No podía ser de otra manera. Fíjate, mi blog y el tuyo apenas se llevan 27 días, aunque tardé algo más en encontrarte, o que tu me encontraras a mi, sea como fuere, bendito encuentro. Benditos los caballos de nuestra ciudad, que fue lo primero que leí, aunque tal vez no la comenté… Los gatos primero observamos un poco antes de acercarnos, tu sabes… Desde luego ha sido un placer aprender tanto aquí, y ver la gran persona que hay detrás de los ceros y los unos. Las luces y las sombras son comunes a todos los aspectos de la vida, tú lo sabes, así que espero que sigas compartiendo las tuyas por mucho tiempo con nosotros.
ResponderEliminarY las gracias siempre a ti, y a Ester claro, que me he reido con lo de las fotos de piedras pero manda hue…
Kisses
P.S. Felicidades también de parte de Moe de Triana que está un poco impedido el hombre y me tiene de recadera.
Esto es nivel y a lo grande, con nombre y apellidos.
ResponderEliminarGracias a ti mil veces por ofrecernos estas maravillosas entredas tan bien planteadas y escritas que nos van mostrando tanto de esta ciudad milenaria.
FELICIDADES
pd. espero que salga adelante lo que hablamos
Ese millón de gracias te lo devuelvo, ya que GRACIAS A TI he conocido muchos aspectos y curiosidades de esta ciudad que creía conocer antes de leerte.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, amigo.
Y que cumplas muchos más.
La verdad Du, no habia reparado en ello y reulta que te sigo casi desde el principio.
ResponderEliminarFelicidades por haber tenido la iniciatíva de escribir en voz alta, me felicito por dar con tu blog que me documenta, refresca y enseña una Sevilla que la mayoría de las veces coincide con la mía.
Felicidades por el nombre, por aparte de la chocante "sevillanía" de tantos.
Te distingue y te legitima como ciudadano el no "expedir" nunca lecciones de sevillanismo.
Los estados de ánimo que comentas no son más que muestras de sabiduría. Los cambios de "registros", como en la música, dan valor y enriquecen a quien los víve, además tu los compartes.
Gracias, espero que en el 47 tengas un recuadro para los que te leímos en aquel frio invierno del 09.
Saludos.
Doria
Sergio (creo que es la primera vez que te llamo por tu nombre real) ojalá no te canses mucho del fruto de ese cabreo que te condujo hasta aquí porque ya estás en nuestras vidas y, como has apuntado bien, el blog ha dejado de pertenecerte por completo (yo quiero un cachito, jejeje).
ResponderEliminarFelicidades.
P.D: ya falta menos para concoerte personalmente, que ya es hora.
Muchas Felicidades amigo Sergio por tu primer Aniversario de Blog.
ResponderEliminarQué decirle al autor, al "maestro escultor de sevillanía", cuyo Blog considero hermano tal y como así quedó reflejado en su día en la sidebar de mi Blog. Gracias a ti, Sergio, he aprendido muchísimo más de Sevilla (y, sobre todo, he aclarado muchas más dudas) que en muchos libros que, como tú, fui recopilando desde pequeño.
No nos des las gracias futuro vecino. Las gracias te las debemos nosotros por acercarnos Sevilla a cada uno de nuestros hogares.
Personalmente, gracias también por compartir conmigo muchas de las dudas vía email.
Un gran abrazo Du Guesclin.
Un gran abrazo Sergio.
Te felicito por el aniversario de tu página, entro casi a diario, para ver si has publicado alguna cosa más, porque la verdad gusta leer las cosas que escribes de esta ciudad tan bonita, para mi la más bonita del mundo entero (se nota que soy sevillano de pura cepa).
ResponderEliminarAsi que ánimo y ENHORABUENA. ALBERTO.
Hablando de "sevillanadas" -un 31 de Enero, inscribian en el Registro Civil a alguien Natural de Sevilla- pero eso hace más de medio siglo. Lo importante no son los años que pasan, sino los días que te paras a leer una nueva sevillanada. Que se cumplan muchos más. FELICIDADES.
ResponderEliminarFelicidades por el blog, y felicidades también por el aniversario. Desde que di con él no paro de leerlo cada vez que tengo un ratillo, y la verdad es que uno aprende muchas cosas. Enhorabuena.
ResponderEliminarFelicidades capitán por este año de exitos!
ResponderEliminarQue nada, que espero que sigas llenando nuestro tiempo con nuevas entradas muchos años mas.
Un abrazo!
Pues con mucho placer esta vez desde Madrid,felicidades esperando leerte por mucho tiempo mas,recordando siempre que tu blog fue el primer blog Sevillano que contesto mi comentario y que me abrio la puesta de otros,todo lo que te digan es poco,todo lo mereces!
ResponderEliminarRecuerdo la primera vez que te encontré. Había entrado en la Taberna de mi querido Tato y vi un comentario. Nunca antes había visto a esa persona. Su nick auguraba una relación cuasi directa con esta ciudad mariana, a veces tan agradecida, otras tan voluble y adaptable. Du Guesclin. Me vino a la cabeza esa Sevilla convulsa por una Guerra Civil entre "lo cruel" y "lo justiciero". Pedro y Trastamara. Y un General.
ResponderEliminarFue entonces cuando crucé ese paso del Rubicón o, mejor dicho, una de esas puertas de Sevilla que con tanto amor, dedicación, profesionalidad y caracter riguroso de documentación e investigación, nos traes en tus interesantes entradas. Fue entonces cuando llegué a este libro abierto de Sevillanadas. Fue entonces cuando conocí al verdadero General. Ni era gabacho ni era un mercenario. Tan sólo un nazareno humilde y bueno. Soldado de terciopelo del Señor de la Salud y defensor a ultranza del Patrimonio de una ciudad de la que está enamorado (con permiso de Ester). Amor incondicional por el descubrimiento y pasión inusitada por la investigación. Gran opinador y arquitecto. Mejor persona.
Luego llegaron los correos. Los contactos. El Vizcaíno. La cita bajo una tenue lluvia que anunciaba una noche sin fin. Nos conocimos y ya no había pseudónimos. Ante mí tenía al verdadero Du Guesclin. Ya no eramos dos nombres escondidos bajo el peso de una máscara. No había caballo. No había cántaras. Ni siquiera una espada medieval o una toledana (por mucho que nos hubiera gustado). Entonces surgió una amistad.
Luego nos fuimos conociendo y se acabó el blog como medio de comunicación. Hay ocasiones en las que se cruza un límite. Una frontera. Una línea divisoria que demuestra que una persona es algo más que un pesudónimo escrito. Fue entonces cuando conocí a mi amigo Sergio.
Más tarde llegó una llamada. Un ofrecimiento. Un trabajo en común. No me lo podía creer. Mi alegría fue in crescendo conforme nos íbamos sumergiendo en el tema a tratar. Pronto se convirtió en un orgullo. Todo un estado de satisfacción y honor que crecía por días al saber que, llegado el momento, mi nombre y el suyo estarían conjúntamente unidos en una entrada. Tuve el honor de colaborar con el gran General Du Guesclin. Con mi amigo Sergio.
Ahora tenemos una amistad. Me vanaglorio de ella y presumo de tenerlo como amigo. Y ahora, cuando entro en su casa. Cuando busco sus Sevillanadas para saciar mi sed de cultura, me encuentro con su aniversario. Un año. Y los que te quedan amigo. Y los que nos quedan amigo.
Felicidades y enhorabuena. Gracias por enseñarnos. Gracias por hacernos aprender de verdad. Gracias por compartir tus trabajos con nosotros. Gracias por hacernos ver cómo era Sevilla y cómo la tratan. Gracias por el cabreo que tuviste hace un año, porque sin él, Sevillanadas no hubiera sido posible. Gracias a ti amigo Du. Amigo Sergio.
Que cumplas muchos más.
Tu amigo Ramsés.
Gracias a ti, por tener un blog tan hermoso y práctico sobre nuestra querida ciudad de Sevilla.
ResponderEliminarFelicidades y un fuerte abrazo.
Enhorabuena Sergio.
ResponderEliminarSabes de sobra mi opinión sobre tu blog, así que no seré tan adulador como tus lectores y amigos, pero te mereces mis felicitaciones por un trabajo y esfuerzo que ya dura la friolera de 365 días, que un año suena a poco cuando se te tiene al lado todas las mañanas dale que te pego con tu querida bitácora.
Durante este año he visto como este cachorro tuyo te ha dado desde las alegrías mas grandes hasta berrinches tremendos, pero siempre has estado orgulloso de él, y lo merece. Así que sigue trabajando y disfrutandolo, que ya pasó aquella época en que parecía que nunca echaría a andar, haz oidos sordos a las críticas que no sean constructivas, y se un poquito mas puñetero, que tu sabes que me divierte muchísimo.
Un saludo a tod@s. Cuidadme al blogger.
Hola, bueno muchas felicidades por este aniversario, seguro que esto es el comienzo de lo mucho que queda por descubrir de nuestra ciudad actual y antigua o de la futura.
ResponderEliminarGracias a ti un saludo
No te vayas a aburrir hombre y sigue así.
ResponderEliminarGracias por acercarnos a todos un poco más esa Sevilla que a veces ignoramos aún viviendo en ella....