Aprovechando el Aniversario de la Expo 92 proponemos una serie de retrospectivas por la Sevilla de los años 80, justo antes de que se iniciara la vorágine de obras que cambiaron de forma radical su fisonomía en apenas un lustro.
Seguro que a muchos estas imágenes les servirán para rememorar vivencias y tiempos pasados mientras que para otros supondrán una auténtica novedad, descubriéndoles una ciudad muy diferente a la que hoy vemos.
Para empezar la serie traemos una vista aérea de la zona Norte de Sevilla, concretamente del antiguo cortijo del Alamillo, el edificio encalado que se encuentra rodeado de árboles frutales.
Aún no está edificado el Puente ni la SE-30, la prolongación de la calle Torneo es un alargue de la vías del tren y los modernos bloques que hoy hacen la fachada hacia el Río son naves y almacenes ferroviarios.
Como decían los abuelos, “todo era campo”, hasta que la SE-30 unió Camas con San Lázaro a través de un Puente diseñado por Santiago Calatrava, el del Alamillo, que estos días acaba de cumplir 20 años desde que se inaugurara el 29 de Febrero de 1992.
Un Puente que en realidad son dos, uno sobre el meandro de San Jerónimo y otro sobre el cauce del Río.
De hecho, tal y como vemos en esta infografía que nos trae José Luis Ortiz del Val, ambos llevaban incluso los dos mástiles atirantados, uno inclinado hacia Camas y el otro hacia Sevilla.
Pero los recortes presupuestarios y el escaso tiempo para finalizar la obra antes de la Expo dieron al traste con el proyecto original, realizándose sólo la primera fase, la más cercana a la ciudad, mientras en la otra se quedaba en un puente más convencional.
Una lástima ya que la imagen, de haberse llevado a cabo como estaba previsto, habría sido espectacular.
Imagen: Sevilla, Paisaje Transformado
Imagen: Sevilla, Paisaje Transformado
Impresionante el cambio que ha dado la ciudad. Enhorabuena por traernos artículos como éste!
ResponderEliminarCreo que esta serie me va a encantar :D
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